Seis bases para la construcción de resiliencia comunitaria (Última parte). Base #6 Coraje.
Como individuos y como comunidad, necesitamos coraje para enfrentar los desafíos y asumir la responsabilidad de nuestro futuro colectivo.
Como individuos y como comunidad, necesitamos coraje para enfrentar los desafíos y asumir la responsabilidad de nuestro futuro colectivo.
La resiliencia de la comunidad no es sostenible si sólo sirve a nosotros, y sólo ahora; Necesita trabajar para otras comunidades, generaciones futuras y los ecosistemas de los cuales todos dependemos.
Algunos desafíos son tan grandes que no es posible que la comunidad simplemente se adapte; Cambios fundamentales, transformativos pueden ser necesarios.
Cuando los sistemas complejos son resilientes frente a perturbaciones o trastornos es porque tienen la capacidad de adaptarse a las circunstancias cambiantes.
El pensamiento sistémico es esencial para entender las complejas e interrelacionadas crisis que ahora se despliegan, y lo que significan para nuestras comunidades igualmente complejas.
El poder de visualizar el futuro de una comunidad y construir su resiliencia reside en sus miembros. Los verdaderos cambios suceden cuando las personas que habitan estas comunidades crean una visión de futuro y lideran el proceso de cambio.
Iniciamos aquí una serie de artículos, basados en el documento original “Six Foundations for Building Community Resilience” de Post Carbon Institute, que describen cómo las comunidades pueden abordar el completo alcance de los desafíos que caracterizan el siglo 21 de forma equitativa y sostenible.
Las redes de apoyo mutuo ayudan a cultivar la resiliencia local favoreciendo la cohesión, la solidaridad y la materialización de nuestros proyectos. Un formato sencillo y eficiente puede ser de gran ayuda cuando resulta difícil hacer acopio de recursos económicos o sencillamente del tiempo necesario para llevar a cabo nuestro propósito.